Cada año se repite la misma historia:
-¡Ui! ¿Yo? ¿Esto? ¡Jamás!
Y caes... Porque lo ves hasta en la sopa, porque Zara está inundado, porque la vecina lo tiene, o simplemente porque sí. En realidad no existe una explicación lógica.
Y al final resulta casi imposible no comprar. Te lo pruebas, te gusta y de repente aparece en tu armario esa prenda que nunca te imaginabas que formaría parte de tu vestuario.
Y al final resulta casi imposible no comprar. Te lo pruebas, te gusta y de repente aparece en tu armario esa prenda que nunca te imaginabas que formaría parte de tu vestuario.
Total look: Oliphant
La respuesta suele ser siempre la misma: ¡Pues tampoco está tan mal!
Y acabas oyéndote a tí misma diciendo "Me gusta, me encanta" y demás piropos hacia esa tendencia que cuando empezó a asomar la cabecita por las revistas y las tiendas te atemorizaba... Así de tontos somos.
Aunque bueno, podemos darle la vuelta al asunto y dejarlo simplemente en que no nos importa probar cosas nuevas no? ;)
Aunque bueno, podemos darle la vuelta al asunto y dejarlo simplemente en que no nos importa probar cosas nuevas no? ;)